domingo, 16 de octubre de 2016

Valores Personales

Todos los valores personales son herramientas para hacer que el individuo se sienta bien con su conducta. Hay una línea fina entre la ética y los valores. Un agresor utiliza un conjunto diferente de valores para vivir su vida. En el ideal de esta persona, cualquier cosa que se haga sentirse mejor y que lo obtenga de otra persona es el valor de usar. No importa que sea en detrimento de otra persona, esta persona utiliza tácticas de acoso y la intimidación para sentirse bien consigo mismo. Estos son los valores personales de esta persona, a pesar de que no están promoviendo el bienestar general.
En varios momentos de la historia, los valores personales han sido parte de la norma general de la sociedad. Actitudes inaceptables, como el racismo, la esclavitud o la dominación, han tenido su lugar en los valores personales como parte de una norma social. Un valor que está mal … como el racismo … puede ser visto como “correcto” en el pensamiento de un segmento particular de la sociedad. En estos casos, el individuo no siente remordimientos por que defiendan sus puntos de vista, y se le ha enseñado que este valor es adecuado para su sociedad.
La mayoría de los valores fundamentales se enseñan como núcleos religiosos. Los Diez Mandamientos de la Biblia judeo-cristiana son los valores personales comunes. La sociedad actual acepta estos valores como valores propios. El mandato de no robar, no mentir, no tener la propiedad de otro, y vivir una “moral” de código forma parte de la fibra de la sociedad para vivir juntos en armonía. Otra condición personal de los valores de la persona para moverse cómodamente en su sociedad como un individuo.


Autorespeto y Autoestima

AUTO-RESPETO
Se basa en conocer quién soy; conocer mi ser interior.
Cuando encontramos esa sensación o sentimiento de identidad profunda, sentimos que tenemos un derecho a estar aquí, a existir. Sin esta dimensión de lo trascendente, es muy difícil apreciarnos realmente a nosotros mismos de una manera genuina y sostenible.
Generalmente, basamos nuestro respeto en identificarnos con los aspectos tangibles o más superficiales de nuestra existencia: nuestro aspecto físico, el género, el éxito profesional, nuestra inteligencia, nuestras habilidades, nuestro status social, nuestra nacionalidad, raza, etc. Con tal identificación superficial, nunca conseguiremos un sentimiento estable de auto-respeto, porque las opiniones de las personas cambian. Hoy puede que nos amen, mañana nos rechazarán.
La mirada del otro
¿Cuál es la consecuencia de depender de tales opiniones? Acabaremos fluctuando todo el tiempo, sintiéndonos positivos cuando nos dicen cosas buenas, y sintiéndonos abatidos cuando nos dicen cosas negativas. Para permanecer estables en nuestro auto-respeto, necesitamos nutrir un entendimiento más profundo de nuestra identidad espiritual y acceder a esas riquezas que están en nuestro interior eternamente, esperando a florecer, como la flor que crece de la semilla.
Crear la conciencia
A medida que nos estabilizamos en tal conciencia, esas riquezas y recursos empiezan a manifestarse. Cuanto más estables estamos en nuestro auto-respeto y espiritualidad, más emanamos lo que realmente somos. Sentimos una profunda sensación de satisfacción y estamos felices de ser lo que somos, tal y como seamos. Nos aceptamos como somos.
Amor y libertad
Cuando estamos desconectados de nuestras raíces espirituales, nos volvemos dependientes de los demás y, desafortunadamente, a veces malinterpretamos esta dependencia como amor cuando normalmente es sólo una necesidad, o un apego. Cuando esto sucede, la relación no puede ser duradera, porque nos hemos apegado a alguien, sin darle ni espacio ni respeto.
Empezarán a sentirse sofocados porque hemos interferido en su libertad y, finalmente, el resultado de la relación es un sentimiento de “atadura”. Sólo cuando el ser está en un estado de auto-respeto completo puede haber libertad en las relaciones.

AUTOESTIMA
La autoestima viene del aprecio que sentimos por nosotros mismos. Cuando nos aceptamos tal como somos y valoramos nuestros recursos internos, nuestras virtudes.
Aceptación no es resignación. La aceptación nace en el entendimiento y permite planear el futuro. La resignación empantana nuestra posibilidades.
Cuando sentimos nuestro valor, entonces los demás también nos valorarán. Cuando no nos valoramos a nosotros mismos, ¿cómo podemos esperar que los demás nos valoren?
Si continuamente nos menospreciamos, pensando "no soy bueno" o "no soy capaz" “no valgo nada”, quienes escuchen esto empezarán a creerlo. Así que, ¿qué deberíamos hacer?
La palabra clave es "conciencia". A medida que nos volvemos más conscientes, más alertas a nivel espiritual, empezamos a estar en posición de valorar nuestra vida. El efecto de esto es que empezamos a valorar a los demás, comprendiendo que todos tienen su propia posición: ni más alta ni más baja, simplemente diferente. La singularidad de cada uno tiene su valor y cuando reconocemos el valor del ser, desarrollamos confianza en nosotros mismos.


Valores de familia y comunidad



Valores morales


Los valores Morales son todas aquellas cuestiones que llevan al hombre a defender y crecer en su dignidad en cuanto persona, porque indefectiblemente el valor moral conducirá al hombre hacia el bien moral, que como sabemos, es aquello que lo perfecciona, lo completa y mejora.

Los valores morales siempre perfeccionarán al hombre en cuanto ser hombre, las acciones buenas, como ser vivir honestamente, decir la verdad y actuar siempre pensando en el prójimo, jamás podrán contradecir el camino hacia la perfección.

En tanto, la elección por los valores morales es una decisión absolutamente libre y no impuesta que tiene cada hombre, es decir, este decidirá si opta por ellos o no, pero sin dudas, el hecho de elegirlos a estos tendrá el directo efecto de hacerlo más humano y de otorgarle una calidad extra como persona.

Existe una gran cantidad de valores morales que perfeccionan y enaltecen a la persona, entre ellos podemos destacar al amor, la gratitud, la amistad, el respeto, la lealtad, la prudencia, la perseverancia, responsabilidad, solidaridad, tolerancia, honestidad, humildad, dignidad, generosidad, bondad, entre otros.

Disponer de algunos de ellos o de todas, sin dudas, nos hará tener una existencia más dichosa. Está probado que la gente que vive conforme a estos valores será más feliz que aquellos que deciden vivir en relación con el odio o la falta de compromiso.




Valores económicos

Un valor económico es el valor de un bien o servicio, según lo determinado por el mercado.
Los  valores económicos de un bien o servicio ha desconcertado a los economistas desde el principio de la disciplina. En primer lugar, los economistas trataron de estimar el valor de un bien a una persona sola, y extender esta definición a los bienes que pueden ser intercambiados. A partir de este análisis fue el valor de los conceptos en uso y valor de cambio.
Maximización de la riqueza predice que una persona va a elegir para obtener el bien o servicio en el lugar donde sea más barato, cuando el importe entregado es el menor.
El valor está vinculado al precio a través del mecanismo de intercambio. Cuando un economista observa un cambio, dos importantes funciones de valor se revelan: la de que el comprador y el vendedor. Así como el comprador revela lo que está dispuesto a pagar por una cierta cantidad de un bien, también lo hace el vendedor revelando lo que le cuesta a renunciar a lo bueno.

Información adicional acerca del valor se obtiene por la velocidad a la que las transacciones se realizan, diciendo a los observadores el grado en que la compra de la mercancía tiene un valor en el tiempo.


Valores Ecológicos.
La ecología se refiere  al estudio de comprender y entender la capacidad de existir y adaptarse a las condiciones ambientales.
Es la actitud de conciencia y de conocimiento individual  sobre el entorno y su realidad  integral la que define y permite una conducta dinámica armónica entre el individuo, su entorno social y su entorno físico biosférico.
En las civilizaciones no industriales, existen o han existido prácticas y razonamientos instintivos y gradualmente conscientes, respecto a la calidad del medio ambiente, el mantenimiento de su condición original o natural y a la necesidad de un cierto grado de cuidado del entorno natural. Esto para evitar, los riesgos inmediatos o posteriores de perder definitivamente los bienes naturales y proporcionales obtenidos bajo perspectivas biohistóricas de espacio y tiempo específicos y/o para evitar las catástrofes que estas condiciones podrían originar. Este sentido común o consciencia de la realidad dinámica del entorno, se habían desarrollado en el ser humano, como algo inherente y algo armónico a sus relaciones con la naturaleza.



Valores de convivencia.

Uno de los valores sociales mas importantes es el de la "convivencia", al cual se refiere a vivir juntos dos o las personas. Se trata de que ambas partes acepten defender sus propios intereses, pero buscando el acuerdo final y no el conflicto como forma de relación permanente.

La convivencia se da en familia, pareja, aulas de trabajo,, comunidad y en tu país. En el sentido de la mejor manera de relacionarlo es convivir los unos con los otros, dotando reglas y normas de convivencia.

Para que se de la convivencia es necesario que las personas se respeten y estimen, que no por ser de otra religión o posición económica crean que son superiores a los demás. La cultura da paso a que todas las personas tengan conocimiento de que somos parte de la raza humana y eso nos debe de dar igualdad para todo



Valores Sociales.
Son aquellos que perfeccionan al hombre en su relación con los demás, buscan el bien común e imperan en la sociedad en el momento en que vivimos.
Estos valores van cambiando a lo largo de la historia y pueden coincidir o no con los valores familiares.
Poco a poco en la Infancia pero sobre todo la adolescencia, vamos descubriendo en el ámbito social se valora el consumismo, el triunfo personal y social a cualquier precio, asi como la falta de respeto a otras personas o actitudes racistas.
Sin embargo los valores familiares y personales determinan en gran medida el criterio para considerar cuales serán los valores que rigen en nuestra vida independiente de la sociedad.


Tipos de valores
Podemos hablar de valores universales, porque desde que el
ser humano vive en comunidad ha necesitado establecer principios que orienten
su comportamiento en su relación con los demás.
En este sentido, se consideran valores universales, la
honestidad, la responsabilidad, la verdad, la solidaridad, la cooperación, la
tolerancia, el respeto y la paz, entre otros.
Sin embargo, puede resultar útil para facilitar su
comprensión, clasificar los valores de acuerdo con los siguientes criterios:
• Valores personales:
Son aquellos que consideramos principios indispensables
sobre los cuales construimos nuestra vida y nos guían para relacionarnos con
otras personas. Por lo general son una mezcla de valores familiares y valores
socio-culturales, junto a los que agregamos como individuos según nuestras
vivencias.
• Valores familiares:
Se refieren a lo que en familia se valora y establece como
bien o mal. Se derivan de las creencias fundamentales de los padres, con las
cuales educan a sus hijos. Son principios y orientaciones básicas de nuestro
comportamientos con los que actuamos en familia, desde los más sencillos hasta
comportamiento inicial en sociedad. Se transmiten a través de todos los
los más “solemnes”.
• Valores socio-culturales:
Son los que imperan en la sociedad en la que vivimos. Han
cambiado a lo largo de la historia y pueden coincidir o no con los valores
familiares o los personales. Se trata de una mezcla compleja de distintos tipos
de valoraciones, que en muchos casos parecen contrapuestas o plantean dilemas.
• Valores materiales:
Son aquellos que nos permiten subsistir. Tienen que ver con
nuestras necesidades básicas como seres humanos, como alimentarnos o vestirnos
para protegernos de la intemperie. Son importantes en la medida que son
valores personales, familiares y socio-culturales. Cuando se exageran, los
necesarios. Son parte del complejo tejido que se forma de la relación entre
valores materiales entran en contradicción con los espirituales.
• Valores espirituales:
Se refieren a la importancia que le damos a los aspectos
no-materiales de nuestras vidas. Son parte de nuestras necesidades humanas y
nos permiten sentirnos realizados. Le agregan sentido y fundamento a nuestras
vidas, como ocurre con las creencias religiosas.
• Valores morales:
Son las actitudes y conductas que una determinada sociedad
considera indispensables para la convivencia, el orden y el bien general

¿Por qué es tan difícil formar valores?
¿Por qué es tan difícil formar valores? Porque, a diferencia de las normas, los valores son convicciones.
Son comportamientos que decidimos con gusto y nos producen satisfacción. Las normas las podemos acatar a pesar de nuestra voluntad, pero los valores tienen el respaldo de nuestra voluntad. Hemos aprendido su importancia por los beneficios que nos producen, individuales y colectivos.
Las personas que en nuestras vidas tienen un rol de liderazgo son quienes nos transmiten más valores. Por eso no es casual que ellas sean nuestros padres, hermanos mayores, abuelos, ciertos familiares, maestros, compañeros estudiantiles que admiramos, profesores y jefes.

Pero para poder transmitir algo hay que poseerlo, y sólo se transmiten a través del ejemplo práctico cotidiano de las actitudes y conductas. Es muy poco probable formarlos con grandes explicaciones o a través de una lista de lo que se considera correcto o incorrecto. La memorización de sus significados teóricos no garantiza que los valores se pongan en práctica.


Conceptualizacion de Valores
Comenzamos a tener valores cuando somos niños. Primero aprendemos a tener aprecio por las cosas que satisfacen nuestras necesidades básicas, pero valoramos especialmente a las personas que nos las proporcionan. Su comportamiento hacia nosotros se vuelve la principal referencia de lo que es valioso.
Por esta razón, nuestro carácter y personalidad se moldea con las actitudes y comportamientos de las personas que nos crían, bien sea los padres u otros familiares. Sus conductas tienen el principal peso de lo que después se convierte en nuestros principios y creencias personales más importantes.
Aprendemos a valorar el fondo y la forma de todo lo que ellos dicen y hacen, así como lo que dejan de decir o hacer. Cada gesto o comentario tiene una gran influencia en la formación de nuestro juicio y aprendemos también a diferenciar la teoría y la práctica de los valores. Esto último es lo que más nos marca.
Así que la consistencia y la coherencia en el comportamiento de nuestros padres es lo que le da solidez a nuestra formación. Si ellos hacen lo que dicen nuestra personalidad será más fuerte que cuando ellos no practican lo que pregonan.
Más adelante, cuando nos volvemos estudiantes, comenzamos a sentir presiones sociales y presión de valores diferentes a los nuestros, a través de la relación con otras personas. Se pone a prueba la fortaleza de los valores que formamos con nuestros padres.
Se suele confundir valores con hábitos, y muchos padres aspiran que el colegio forme los valores que no fueron formados en la casa. Eso no es posible, simplemente porque el colegio no satisface necesidades básicas de vida, esa es responsabilidad de las personas que nos crían.

Los maestros, líderes y modelos de valores en el colegio, tienen la posibilidad de reforzar lo formado en el hogar, pero no sustituirlo. Si las convicciones que se forman en la casa no son sólidas, pronto se verán expuestas a una intensa competencia social con otras creencias.


sábado, 15 de octubre de 2016

BIENVENIDOS

Bienvenidos a este Blog donde aprenderás los valores y mas allá de ellos, y no solo hablamos los conocidos y básicos, sino como su conceptualismo .
Ademas que es para un proyecto, así que nos ayudarían que nos dejaran comentario y nos recomendaran.
Gracias.






"Bienvenidos al Blog del Conocimiento, aqui aprenderas muchas cosas para que no seas un pin@#% bu@#& sin valores".